domingo, 11 de mayo de 2014

MANUEL UGARTE Y EL IMPERIALISMO





"No es indispensable anexar un país para usufructuar su savia. Los núcleos poderosos sólo necesitan a veces tocar botones invisibles, abrir y cerrar llaves secretas, para determinar, a distancia, sucesos fundamentales que anemían o coartan la prosperidad de los pequeños núcleos. La infiltración mental, económica o diplomática puede deslizarse nuevamente sin ser advertida por aquellos a quienes debe perjudicar porque los factores de desnacionalización no son ya, como antes, el misionero y el soldado, sino las exportaciones, los empréstitos, las vías de comunicación, las tarifas aduaneras, las genuflexiones diplomáticas, las lecturas, las noticias y hasta los espectáculos".

Manuel Ugarte
En "La Patria Grande", 1922

“Las conquistas modernas difieren de las antiguas en que sólo se sancionan por medio de las armas cuando ya están realizadas económica o políticamente. Toda usurpación material viene precedida y preparada por un largo período de infiltración o hegemonía industrial capitalista y de costumbres, que roe la armadura nacional, al mismo tiempo que aumenta el prestigio del futuro invasor. Por eso, al hablar del peligro yanqui, no debemos imaginarnos una agresión inmediata y brutal que sería hoy por hoy imposible, sino un trabajo paulatino de invasión comercial y moral que se irá acreciendo con las conquistas sucesivas”
Manuel Ugarte
En el diario “El País”, octubre de 1901

COLONIALISMO IDEOLÓGICO

“Los órganos de información gastan sumas fabulosas para tenernos al corriente de cuánto ocurre en Londres, París o Viena y nos refieren con detalles prolijos la vida y las preocupaciones de las naciones de Europa. Como se ocupan, en cambio, muy  poco de América y de sus problemas típicos, la lectura diaria nos ha identificado gradualmente con el ambiente extranjero hasta desplazarnos, por un fenómenos de ilusión, de nuestro propio ser. De esta increíble ficción han nacido europeos a distancia, europeos por cable”

Manuel Ugarte
En “El dolor de escribir”, 1932

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